Como os he comentado en otros posts, no soy vegetariana, pero sí me gusta comer de forma saludable y es cierto que en mi dieta suelen haber más ingredientes vegetales que animales. Además que, como siempre os digo, me gusta mucho probar cosas nuevas. Si no me gustan no repito jaja, pero si me gustan las incluyo en mi lista de recetas mensuales.
¿Y cómo llegué a esta receta? Bueno, yo no suelo comer tofu, más allá de en sopas japonesas o alguna comida china. Justamente compré hace unos días un paquete para hacer sopa de miso (podéis ver la receta aquí), pero me sobraba bastante y claramente no iba a tirarlo. En paralelo, resulta que mi hermana hace unos meses que se ha hecho vegetariana, así que también me gusta mucho probar recetas que sé que luego le pueden gustar. Para romper la barrera de que el tofu es soso o aburrido, busqué maneras de condimentarlo y crear platos bien sabrosos y ¡qué delicia! El salteado de verduras me encanta, no sé a vosotros, pero es que además la salsa de caldo y soja, espesada con un poco de Maicena es todo un éxito.
Yo no soy una experta en tofu, pero a raíz de leer mucho para darle ideas a mi hermana, además de mis ganas de conocer y probar, he aprendido algunas cositas que, aprovechando que os traía esta receta, quería comentaros, sobretodo para los que sois más nuevos en este entorno y por si os ayuda.
El tofu es una muy buena fuente de proteínas vegetales sin ingredientes animales, además de tener muchas propiedades nutricionales, un alto contenido en minerales y fibra y aportar grasas saludables con pocas calorías. Hay que tener en cuenta que es un producto obtenido de la soja, que es una legumbre ya de por sí con muchos beneficios nutricionales.
Hay varios tipos de tofu, el más común es el «firme», pues es el que da más juego a la hora de cocinar. También lo hay «sedoso» o «silken», más ligero y cremoso. Lo que variará entre un tipo y otro es la consistencia y la textura, que dependen del agua utilizada al elaborarlo. ¡Y no nos olvidemos de la marca! Como todo, según la marca tendremos una calidad u otra, así que os aconsejo poner atención a este detalle. El tofu «firme» es el que encontraréis más fácilmente y también es el que os recomiendo si nunca habéis probado el tofu o no lo habéis cocinado nunca. Es el más sencillo de incorporar a una gran variedad de recetas.
Es cierto que el tofu como tal no tiene sabor (a menos que no compréis uno ya mezclado con algún otro alimento), por lo que el truco estará en la forma de cocinarlo. Ante todo, si veis que tiene mucha agua, escurridlo bien. Y luego dejad volar vuestra imaginación. Habitualmente se corta en cubos o tiras y lo más habitual es saltearlo o plancharlo. Es aquí donde podemos añadirle sabor con aceites o salsas, así como variedad de especies. Incluso podríais rebozarlo con harina y hacer todavía más crujiente la parte exterior. Lo que no es recomiendo es marinados o cocinados largos, porque humedecerán la carne del tofu y su textura interior será poco agradable.
Como veis el tofu es muy versátil y puede sustituir perfectamente la carne o el pescado en cualquier receta, ¡peor incluso combinarlo con alguno de estos dos ingredientes! Un salteado de gambas con tofu os aseguro que es una delicia para el paladar. Podéis hacer woks con verduras, sopas, arroz, quinoa, cuscús, estofados, legumbres, pasta, tacos, tostadas, lasañas veggie, ensaladas,…
Espero que este post os de ideas para crear vuestra propia receta, la que más se adapte a vuestros gustos. Si probáis alguna receta, compartidla con el hashtag #Virutasdelimon y así podré ver vuestras creaciones e incluso probarlas. Y si todavía no me seguís en Instagram, recordad que allí comparto el día a día del blog, recetas exclusivas y donde podéis dejarme vuestros comentarios ?
Tiempo total: 30 min
Raciones: 2 personas
Dificultad: Baja
Ingredientes:
- 400 gr tofu firme
- 1 cebolla pequeña
- 1/4 puerro
- 1 zanahoria
- 50 gr brocoli
- 1/2 pimiento rojo
- Especias al gusto
- Arroz (opcional)
- Salsa:
- 190 ml caldo de verduras (o agua o agua + pastilla caldo)
- 4 cdas salsa soja
- 1 y 1/2 cda panela (podríais usar azúcar blanco)
- 2 cditas Maicena (o cualquier otro almidón)
Elaboración:
Paso 1:
Lo que haremos primero será cortar todas las verduras a la juliana, a excepción del brocoli que lo trocearemos. Calentaremos un poco de aceite en una sartén y pondremos la cebolla y el puerro a saltear. Cuando empiecen a tener color agregaremos el pimiento y la zanahoria. En este punto podéis salpimentar al gusto, así como agregar las especies que más os gusten.
Seguiremos cocinando hasta que estén bien dorados y cocidos. Yo suelo cocinarlo a fuego fuerte unos 10 min y después voy agregando un poco de agua para que se vaya pochando un poco. Al final le doy un golpe de calor para que se dore. En unos 15 o 20 min deberíamos tenerlo. Lo pondremos en un plato y lo reservaremos.
Paso 2:
En la misma sartén saltearemos el brocoli, pues con unos 5 min ya tendremos bastante para que se cueza y se dore. Lo pondremos en el mismo plato que el resto de verduras.
Paso 3:
Mientras se saltea el brocoli, escurriremos bien el tofu y lo cortaremos en cubos más bien grandes, como imitando un estofado. Una vez el brocoli esté hecho y lo retiremos del fuego, en la misma sartén doraremos el tofu. Con un par de minutos será suficiente para que coja color, pero si queréis también podéis poner una gotita de aceite o soja y dejarlo unos 5 min para un extra de sabor y crujiente.
Paso 4:
Mientras salteamos el tofu, empezamos con la elaboración de la salsa. ¡Multitasking a tope! En un vaso o recipiente mezclaremos primero los líquidos (que deben estar fríos o a temperatura ambiente). Después agregaremos la Maicena y removeremos muy bien para que se diluya e integre bien.
Paso 5:
Cuando el tofu esté listo, verteremos por encima todas las verduras y mezclaremos. Seguidamente verteremos por encima la salsa y lo removeremos todo durante unos minutos, hasta que veamos que la salsa espesa (lo hará, no sufráis). Cuando tengamos la consistencia perfecta, apagaremos el fuego y lo serviremos.
Podemos comerlo así tal cual o acompañarlo de una pasta o cereal. Yo opté por cocinar arroz (que también puede ser integral) y hacer una especie de plato combinado o scramble. Si optáis por una versión así, en cuanto empecéis a saltear las verduras, en otro fuego poned a calentar el agua y cocinad el acompañamiento.
Espero que lo disfrutéis tanto como yo.
¡A comer! ?