Este verano no os he compartido muchas recetas de helados, pero no quería que acabar la temporada sin compartiros este recetón: HELADO SANDWICH SALUDABLE, con unas galletas de avena y cacao y un relleno de plátano y leche de coco que está para morirse!!
¿Quién no se ha comido alguna vez el clásico sándwich helado de stracciatella? Dos capas de galleta con un interior cremoso, un bocado que disfrutan tanto grandes como pequeños. ¿Y por qué no hacerlo casero y en una versión más saludable? Pues aquí vengo yo con una receta que os va a encantar y en la que os doy opciones para que la hagáis vuestra. He intentado capturar el sabor con la cámara, así que espero traspasar las pantallas y que os animéis a poneros manos la masa, la verdad es que están buenísimas!
La receta no puede ser más sencilla, y además os doy un montón de opciones para personalizarla y adaptarla a vuestro gusto:
- Podéis usar, tanto para la galleta como para el relleno, el endulzante deseado y en la cantidad deseada. Las instrucciones que os doy ya son de por si healthys, pero podéis reducir todavía más el azúcar.
- Para el relleno yo he usado plátanos, pero podríais usar la fruta que más os guste. Os recomiendo que sean frutas con menos cantidad de agua, para que os quede más cremoso y no tipo polo. Mango, melocotones, peras,… son opciones muy top!
- Las galletas las haremos con cacao, así que si quisierais hacer todo el helado de chocolate podríais también añadirle cacao a la mezcla del relleno y tener la opción completa. También os comento que podéis usar cualquier receta de galletas, por ejemplo con cookies quedarían brutales!!
- Y no quiero acabar estos tips y recomendaciones sin hablaros de la cocción de las galletas. Son muy fáciles de preparar y además las podéis incluso consumir en crudo!! Es una masa muy sencilla y que aguanta bien en la nevera 3-4 días, así que podéis prepararlas con antelación. Aunque sin cocinar están ricas, es más probable que se desmonten, así que os recomiendo cocinarlas. Abajo en la elaboración os cuento las 2 opciones, con y sin horno. La verdad que la opción micro es genial, me huelo que más de uno se preparará estas galletitas muy a menudo 😉
Para darle forma he usado un cortador redondo tipo flor, para hacerlo diferente y con un toque divertido, pero podéis hacerlos rectangulares como los originales o usar cualquier cosa que tengáis a mano. Eso sí, usad lo mismo para las galletas y relleno, para que tengan la misma forma y encajen a la perfección a la hora de montar el sandwich. Ah! y sin problema podéis duplicar las cantidades si queréis hacer más helados.
En el post de la receta de mi Instagram os he dejado (deslizando las fotos) los vídeos de los stories que grabé cuando hice la receta, así no surgen dudas de nada.
¡Espero que lo disfrutéis y pongáis la guinda al verano con esta super receta!
Tiempo total: 15 min + refrigeración
Raciones: 3-4 helados (según tamaño)
Dificultad: Baja
Ingredientes:
- Galleta:
- 80 gr harina de avena o de almendra
- 3 cdas cacao puro en polvo
- 90 gr crema de cacahuete (o cualquier fruto seco) o 60 gr aceite coco *Si la mezcla no se compacta, añadir 1 cda agua/bebida vegetal
- 3 cdas sirope de agave o sirope de arce o miel (o endulzante al gusto) *Podéis variar la cantidad según dulzor deseado
- Relleno:
- 3 plátanos congelados troceados
- 80 ml leche coco en lata o 4 cdas bebida vegetal al gusto
- 1 cdita vainilla (opcional)
- 1 cda sirope de agave o sirope de arce o miel o especias (opcional)
- 1 puñado chips choco negro (opcional)
Elaboración:
Paso 1:
Empezaremos preparando el relleno. Para ello, sacaremos los plátanos 15 min antes, para que nos cueste menos triturarlo. Lo procesaremos junto con la leche de coco y el resto de ingredientes que escojamos para nuestro helado. Una vez triturado y que tengamos una mezcla homogénea, agregaremos las chips si decidimos añadirlas y verteremos la mezcla en una fuente/tupper forrado. El molde que usemos debe tener el tamaño adecuado para poder tener una altura de mezcla de unos 2-3 cm (o el grosor de helado deseado).
Lo llevaremos al congelador 2-4 horas.
Paso 2:
Mientras se refrigera el relleno podemos preparar las galletas. Si no tenemos la harina de avena o almendra, podemos hacerla en casa procesando copos de avena o el fruto seco.
Después, mezclaremos todos los ingredientes en un bol, con las manos, hasta tener una masa compacta y con la que poder formar una bola. Si vemos que se nos desmiga o rompe, podemos agregar un poquito más de crema de frutos secos o bebida vegetal para darle consistencia.
Paso 3:
Pasaremos la bola a un papel vegetal y la estiraremos con un rodillo hasta conseguir un grosor de 0,5 cm aprox. Con un cortador de galletasn(o vaso, o lo que sea que tengáis a mano!) formaremos las galletas. Uniremos los recortes para hacer más, siempre teniendo en cuenta que salgan pares para tener las dos «tapas» del sandwich.
En este punto se pueden ya comer/usar así, pero como os contaba arriba os recomiendo cocinarlas para que no se rompan. Os doy 2 opciones:
1) Cocinarlas al micro, con lo que conseguiremos una textura más blanda, tipo brownie. Esta opción me encanta y es la que he usado. Mucho más rápida que el horno y la textura es perfecta. Lo haremos en tandas de 30 segundos, en un plato llano forrado, hasta que veamos que cambian de color y les sale como una “burbuja” en la parte de arriba. Aprox tardaremos unos 2 min.
2) Hornearlas a 180ºC unos 10-12 min, con lo que conseguiremos una textura crujiente. Al sacarlas del horno hay que dejarlas enfriar 5 min en la misma bandeja y luego pasarlas a una rejilla con cuidado para que enfríen por completo.
Paso 4:
Pasado el tiempo de enfriamiento del relleno, con el mismo cortador que hayamos usado para crear las galletas, cortaremos el helado ya frío (podéis sacarlo unos minutillos antes para que os sea más fácil). Serviremos cada trozo entre 2 galletas y voilà!!
Podéis conservar el sandwich tal cual, con la galleta y todo, en el congelador. No hace falta que os lo comáis de una sentada (o si!).