En Navidad, con todas las celebraciones y reuniones familiares, siempre es una buena ocasión sorprender a alguien con unas galletitas caseras. Hoy os traigo dos opciones súper fáciles pero deliciosas y muy vistosas, ideales para esta época navideña en que son tan típicos los frutos secos, las frutas confitadas, el chocolate y los aromas.
Por un lado os enseñaré cómo hacer unas galletitas tipo té con té matcha, medio bañadas en chocolate blanco y con unos detalles de fruta confitada. Por otro lado haremos una especie de tejas de almendra o florentinas con almendras y frutas confitadas. Es sencillo crear la masa base de ambas elaboraciones y lo divertido es que podemos hacer diferentes variedades. Las de té matcha no dejan de ser unas galletas de mantequilla a la que podemos añadirle chocolate o cualquier colorante para hacerlas aún más divertidas. O, por ejemplo, podemos bañarlas en chocolate negro. Para las de almendra, podemos no agregar la fruta o utilizar frutos secos que combinen bien.
Veréis que las cantidades son ajustadas, pensando en hacer las dos variedades de forma conjunta, pero si optáis por hacer solo una de las dos versiones, entonces os recomiendo duplicar las medidas y así tener más cantidad para ofrecer.
Tiempo total: 60 min + 1 hora de enfriado
Raciones: 8 galletas de frutas + 8 de té matcha
Dificultad: Fácil
Ingredientes galletas de frutas:
- 125 gr almendras laminadas
- 80 gr panela (o azúcar blanco)
- Ralladura de 1/2 limón
- 15 gr harina de trigo (opcional)
- 1/4 cdita bicarbonato
- 2 claras de huevo
- 10 gr miel (opcional)
- 25 gr mantequilla derretida
Ingredientes galletas de té matcha:
- 90 gr harina de repostería
- 80 gr mantequilla temperatura ambiente
- 45 gr azúcar glas
- 20 gr clara de huevo
- 4 gr polvo de té matcha
- 1/2 cdita esencia de vainilla
- Chocolate blanco para la decoración (opcional)
- Fruta confitada a cubitos para la decoración o nueces desmenuzadas o pistachos (opcional)
Elaboración:
Paso 1:
Empezaremos preparando las galletitas de fruta confitada, ya que deben reposar 1 hora en la nevera. Para ello mezclaremos en un bol las almendras, la panela, la ralladura, la harina y el bicarbonato. Cuando esté bien repartido agregaremos la miel y la clara de huevo y removeremos bien. A continuación repetiremos el proceso con la mantequilla derretida y removeremos hasta integrar por completo.
Si queremos ponerle fruta confitada la cortaremos a taquitos pequeños y la agregaremos a la masa, sino también podéis dejarlas sin y hacerlas solo de almendras, ¡riquísimas!
Taparemos el bol con papel film y lo llevaremos a la nevera 1 hora.
Paso 2:
Pasado el tiempo de enfriado, sacaremos la masa de la nevera y formaremos bolitas en una bandeja de horno forrada con papel vegetal, colocándolas separadas entre ellas. Con una cuchara, chafaremos las bolas para extenderlas, más o menos según el grosor que queramos conseguir. La idea es que quede bastante fino y crujiente, sobretodo para la opción de solo almendra, pero como prefiráis.
Cuando más gorditas, necesitarán más tiempo de horneado y quedarán algo menos crujientes.
Paso 3:
Llevaremos las galletas al horno, pre-calentado a 180ºC, unos 10 o 15 min o hasta que veamos que se doran y están crujientes. No os preocupéis si están algo blanditas justo al retirar la bandeja, ya que al enfriar endurecen, pero no deberían estar muy blandas u os quedarán tipo «chicle».
Al sacarlas del horno, las dejaremos enfriar unos 10 min en la misma bandeja y después las trasladaremos a una rejilla, ayudándonos con una espátula. Las dejaremos así hasta que enfríen por completo.
Una vez frías, si lo deseamos, podemos bañar una de las partes con chocolate, mojándolas por un lado y dejándolas secar del revés. Este es un paso totalmente opcional.
Paso 4:
Mientras hornean las anteriores galletas, prepararemos las de té matcha y así poder aprovechar el horno ya caliente. En la cocina, ¡el truco es optimizar!
Para esta segunda variedad de galletitas, primero de todo batiremos la mantequilla a alta velocidad, unos 5 min, hasta conseguir una pomada. Después, agregaremos el azúcar tamizado y batiremos otros 5 min hasta conseguir una masa homogénea.
Paso 5:
Al bol anterior agregaremos la esencia de vainilla y las claras de huevo y removeremos 1 o 2 min, lo justo para integrar. Entonces, tamizaremos la harina y el polvo de té marcha e integraremos con una espátula y movimientos envolventes. Debemos conseguir como una especie de crema o pomada en la que no veamos restos de harina y en la que el color (el té) se haya repartido de forma uniforme.
Paso 6:
Pondremos la masa en una manga pastelera con una boquilla rizada y haremos las formas sobre un papel de horno. Pondremos la manga en posición vertical y presionaremos sin parar hasta completar el círculo, superponiendo ligeramente el inicio y el final para que queden unidos y den esa idea de «lazo». Cuando hayamos acabado la masa, hornearemos las galletitas a 160ºC durante unos 10 o 15 min o hasta que empiecen a dorarse.
Paso 7:
Cuando las saquemos del horno las dejaremos unos 10 min en la misma bandeja y después las trasladaremos a una rejilla para que enfríen por completo. Cuando estén completamente frías, bañaremos una puntita en chocolate blanco previamente derretido y, si lo deseamos, podemos decorar con fruta confitada cortadita muy pequeña. También ligan muy bien frutos secos como nueces o pistachos, ambos desmenuzados.
Y así de fácil tenemos dos variedades de galletas para nuestras fiestas navideñas, unos dulces caseros fáciles y muy vistosos, ¡además de que deliciosos! ¿Con cuál os quedáis?