Con la receta de hoy, más de uno va a volver a su infancia!! De pequeño (bueno y de grande jijiji), ¿quién no era fan de los filipinos? Yo siempre me he inclinado por los blancos, pero los de chocolate negro que os comparto en el post de hoy ya os digo que están demasiaaaado buenos.
Es una receta de postre saludable de lo más sencilla. Simplemente tendremos que preparar una masa de galletas bien fácil, dividirla en dos partes para poder hacer los dos tipos de filipinos (aunque podéis hacerlos todos de 1 solo sabor ajustando cantidades), refrigerar y hornear. Finalmente, bañar las galletas en coberturas de chocolate (del sabor/color opuesto). El resultado es una galleta crujiente y sabrosa, con el punto justo de dulzor, y una cobertura fina y chocolateada que se derrite en boca. Demasiado TOP!
No hay nada como lo casero y ya os digo que esta receta de filipinos caseros saludables os sorprenderá mucho por lo fácil que es y por lo logrado del resultado, ya que su sabor sin duda es como el de los filipinos originales. Como siempre, tenéis el paso a paso más abajo, pero también os quería dejar el enlace a la vídeoreceta que he publicado en mi Instagram para que no os perdáis detalle.
Ya os avanzo que son adictivos y que vais a querer devorarlos de una sentada. Al ser pequeñitos, es fácil decir lo de “va, uno más y ya” y acabar comiéndote toda la bandeja!
Para más recetas de galletas, no olvidéis visitar la sección de cookies del blog, hay para todos los gustos.
Tiempo total: 60 min + refrigerado
Raciones: 20 filipinos
Dificultad: Baja
Ingredientes:
- 1 huevo
- 1 cda extracto de vainilla
- 30 gr panela (o azúcar de coco o endulzante al gusto)
- 100 gr harina de trigo todo uso (o integral o de avena)
- 35 gr aceite de coco
- Extra para la masa blanca: 30 gr harina (la misma que se use en la masa)
- Extra para la masa negra: 25 gr cacao puro en polvo + 1 chorrito leche (o bebida vegetal)
- Cobertura blanca: 80 gr choco blanco (sin azúcar) + 1/2 cdita aceite de coco
- Cobertura negra: 80 gr choco negro +85% + 1/4 cdita aceite de coco
Nota 1: Si deseado, las cantidades de aceite de coco se pueden sustituir por mantequilla (tanto en la masa como en las coberturas).
Nota 2: Podéis hacer toda la masa de uno de los dos sabores, pero deberéis ajustar las medidas.
Elaboración:
Paso 1:
Empezaremos batiendo el huevo y la vainilla. Luego agregaremos el endulzante deseado y mezclaremos para integrar.
Paso 2:
Añadiremos la harina y a medio remover añadiremos también el aceite de coco derretido. Seguiremos removiendo hasta no ver rastros de harina.
Paso 3:
Dividiremos la masa en 2 partes iguales, en 2 boles. Uno será para la masa blanca y el otro para la negra.
En el bol de la masa blanca agregaremos el extra de harina indicado e integraremos bien. Haremos una bola y envolveremos en film, aplanándola un poco.
En el bol de la masa negra, añadiremos el cacao y mezclaremos un poco. Luego verteremos el chorrito de leche e integraremos bien, si es necesario con la ayuda de las manos. Envolveremos en film y aplanaremos.
Refrigeraremos las masas entre 1 y 2 horas.
Paso 4:
Pondremos cada masa entre dos papeles vegetales y estiraremos con un rodillo, de un grosor considerable, hay que pensar que queremos hacer filipinos (ver fotos de referencia). Recortaremos las masas en círculos con un cortador de galleta, un molde de cartón o lo que tengamos a mano, recordando mantener la medida de filipino. Agujerearemos el centro de cada círculo. Uniremos los sobrantes y repetiremos todo el proceso, hasta acabar con ambas masas.
Paso 5:
Hornearemos, pre-calentado a 190ºC, durante 12-15 min. Pasar a una rejilla y dejar enfriar 5 min.
Paso 6:
Preparar en dos boles diferentes las coberturas, derritiendo cada chocolate con la cantidad indicada de aceite de coco. A continuación, bañar los filipinos blancos en el chocolate negro y los negros en el chocolate blanco. Ir dejándolos en una rejilla con un papel vegetal debajo para que vaya cayendo el exceso de chocolate.
Refrigerar 30 min y volver a bañar los de chocolate blanco (los negros los dejamos en la nevera, con una capa es suficiente). Volveremos a llevar a la nevera y los dejaremos hasta que endurezca el chocolate.
Os recomiendo conservarlos en la nevera, sobretodo ahora que se acerca el calor, para que el chocolate quede bien durito.
Espero que lo disfrutéis mucho!!!