No os engañaré, ¡no hace más de 1 año que como curry! Y diréis, ¿y ahora nos trae una receta de curry? Bueno sí, pero es que más vale tarde que nunca ¿no? Todo viene porque yo odio profundamente el picante, lo siento es así, y siempre asociaba el curry al picante. Pero cuando uno se pone a investigar y se deja llevar por recomendaciones descubre maravillas como estas.
Un buen curry es sinónimo de confort y sensación de bienestar. Un curry bien hecho siempre apetece, sobretodo en los meses de frío, y es un básico en todo recetario. Es una receta comodín para las cenas ajetreadas durante la semana o como opción ligera un día perezoso. Lo bueno del curry es que lo puedes personalizar a tu gusto, usando las verduras que quieras o que encuentres en tu nevera, ¡perfecto para recetas de aprovechamiento! Se puede dejar un poco más líquido y comerlo tipo sopa con unos noodles o dejarlo más espeso tipo salsa y complementarlo con arroz, quinoa, tofu o carne.
Se puede preparar el fondo de caldo o salsa con hasta 3 días de antelación y recalentarlo en el momento. Esto también es una buena opción para, con una sola base, preparar varios platos, añadiendo los extras que se deseen en cada momento. El truco de un buen curry es la base, hay tener una buena salsa de base, sabrosa y con textura. Y, por supuesto, podéis añadirle un toque picante si os gusta.
El curry de hoy me parece una maravilla, tampoco he probado muchísimos, pero este me parece delicioso, por sus aromas, variedad de sabores, el terciopelo de la leche de coco y la mezcla de toppings requetedeliciosos.
¿Plato colorido, con diferentes texturas y sabores? ¡Me apunto!
Tiempo total: 40 min
Raciones: 2 personas
Dificultad: Baja
Ingredientes:
- 200 ml leche de coco
- 200 ml caldo de verduras
- 1 cebolla
- 1 cdita curry (no picante o al gusto)
- 1 cdita jengibre en polvo
- 1/2 cdita cúrcuma
- 1/2 zanahoria
- 1/2 boniato
- Hojas de col
- 50 gr tofu
- 100 gr noodles de arroz
- Brotes o germinados
- Sésamo
Elaboración:
Paso 1:
Empezaremos preparando la base de curry. En este caso lo haremos tipo sopa, por lo que no quedará espeso como una salsa. Primero picaremos la cebolla fina y la sofreiremos, hasta que coja color y se dore. Después añadiremos las especies y 1 cda del total del caldo, removeremos bien y sofreiremos un par de minutos.
Después agregaremos el resto del caldo y la leche de coco, taparemos y cocinaremos 15 min.
Paso 2:
Pasado el tiempo de cocción, trituraremos la mezcla. Lo volveremos a poner al fuego y agregaremos al caldo la zanahoria en láminas finas, el boniato en cubitos y las hojas de col. Volveremos a tapar y cocinaremos 15-20 min o hasta que las verduras estén tiernas.
En paralelo cortaremos en cubitos el tofu y lo saltearemos hasta dorar y coceremos los noodles de arroz según las instrucciones del paquete.
Paso 3:
Cuando tengamos el curry hecho y las verduras cocidas, lo serviremos en un plato o bol. Agregaremos por encima los noodles, el tofu y los brotes. Repartimos un poco de semillas de sésamos por encima de todo el conjunto y estará listo para comer.
Si queréis podéis duplicar la receta de la base del curry y guardarla en la nevera hasta 3 días para hacer otras combinaciones. Como habéis visto, es una receta rápida de preparar, muy sabrosa, llena de matices e increíblemente reconfortante. ¡Y llena de nutrientes!