¡Feliz día de Reyes!
Hoy estoy súper nostálgica, porque es un año muy diferente y en el que celebrar un día tan lleno de magia lejos de la familia es duro y da penita. Pero me he animado mucho preparando esta súper receta. Lo sé, no es nada saludable y enero es el mes de los propósitos deportivos y las dietas, pero un día es un día y no podían faltar unos buenos churros caseros para desayunar.
En mi familia es tradición juntarnos todos muy temprano por la mañana y desayunar churros con chocolate caliente, antes de ponernos a abrir todos los regalos. Este año los churros los hemos preparado caseros, y la verdad que están deliciosos y poco tienen que envidiarle a los comprados. Y me encanta poder controlar el dulzor del chocolate a la taza, porque a mi me gusta bastante amargo para compensar el dulzor del churro, y así lo preparo como más me gusta!
Más allá de mi propia tradición especial, los churros con chocolate son una de esas meriendas o desayunos que apetecen de manera especial en los días fríos de otoño o invierno, con una peli de fondo o como actividad para divertirse con los niños.
Es una receta muy sencilla de preparar, y vais a necesitar muy pocos ingredientes, todos muy comunes. Los churros tradicionales no son más que una masa a base de harina, agua y sal, frita en abundante aceite caliente y servida al momento espolvoreada con azúcar. En la versión que os enseño hoy voy a usar mantequilla y huevos, simplemente es una variante de la receta, pero si no queréis usar estos ingredientes, sois alérgicos o tenéis alguna intolerancia, podéis hacer sin problema la receta, simplemente hay que ajustar los ingredientes. Aquí podéis ver cómo preparar esta masa de churros al estilo traidcional.
Tiempo total: 25 min
Raciones: 20-25 churros
Dificultad: Baja
Ingredientes:
- 85 gr mantequilla
- 235 gr agua
- 20 gr azúcar blanco
- 5 gr sal
- 145 gr harina de trigo todo uso
- 3 huevos + 1 yema
- Azúcar para rebozar
- Aceite para feír
Elaboración:
Paso 1:
Empezaremos derritiendo en un cazo u olla la mantequilla, a fuego medio.
Paso 2:
Cuando la mantequilla se haya derretido, agregaremos el agua, el azúcar y la sal. Removeremos y dejaremos que rompa a hervir.
Paso 3:
Cuando la mezcla rompa a hervir, mantendremos un hervor suave y añadiremos la harina. Removeremos con una lengua repostera hasta tener una masa completamente homogénea y suave, completamente integrada.
Paso 4:
Apagaremos el fuego y añadiremos los huevos y la yema. De nuevo removeremos de forma enérgica hasta que se combine por completo. Puede costar un poco y os puede parecer que al principio parezca que no se integra y que os quedan como grumos. Seguid batiendo y veréis que finalmente conseguiréis una masa ligada y suave.
Pasaremos la masa a una manga pastelera o bolsa de plástico, con una boquilla de estrella medio-pequeña. Si tenéis churrera, pues genial, simplemente tenéis que poner la masa dentro y cerrar para comprimirla.
Paso 5:
Calentaremos abundante aceite y cuando esté caliente presionaremos la manga pastelera con la masa directamente en el aceite, cortaremos con unas tijeras según la largura que deseemos y dejaremos que la masa se fría unos 3-4 min por lado.
Recomiendo freír los churros de poco a poco, para que tengan espacio para flotar y dorarse. Dependerá del tamaño de la sartén u olla donde se frían.
Paso 6:
Cuando los churros estén dorados y cocinados, los pasaremos a un papel absorbente, donde los dejaremos 15 segundos. Luego, cuando aún calientes, los rebozaremos en azúcar. Espolvorearemos el sobrante y ya los podremos ir colocando en el plato de presentación o en una paperina para que guarden el calor.
Acompañados de un buen chocolate a la taza están de locos!!!