¡¡Hola!! Hace ya mucho tiempo que os compartí un delicioso y precioso bundt cake y os prometí que usaría mucho el molde y os enseñaría muchas cositas, ¡pero no he tenido tiempo! De todas formas, lo prometido es deuda, así que aquí os traigo otra idea, como podéis ver muy chocolateada.
Ya os avanzo que no es una receta healthy como las que últimamente os traigo, pero de vez en cuando se puede pecar. De hecho, ayer montando el calendario para este mes vi que el lunes que viene es ¡el día de saltarse la dieta! Así que no se me ha ocurrido una mejor receta que esta: un bizcocho de miga densa, pero esponjosa y jugosa, casi llegando a un tipo brownie. Es una receta muy sencilla, sin complicaciones o ingredientes raros, lo cual es genial porque a veces apetecen recetas que se hagan en un plis plas y que estén deliciosas. Lo único malo de esta receta es el tiempo de horneado, es largo y a medida que se llena la cocina de olor a chocolate os aseguro que se os hará la boca agua.
Ya sé que encender el horno ahora que ya llega el buen tiempo parece que da más pereza, pero el esfuerzo merece la pena, el resultado os encantará. Al estar hecho a base de cacao, tiene un sabor intenso irresistible. De todas formas, recordad que en el blog también tenéis tartas sin horno y frías, gran variedad de cheescakes, no os las perdáis.
¡Ah! Si os estáis preguntando cuál es el molde, es el Brilliance de Nordic Ware, ¡toda una preciosidad!
Tiempo total: 70 min
Raciones: 1 molde Brilliance Bundt – Nordic Ware 25 cm
Dificultad: Baja
Ingredientes:
- 175 gr mantequilla a temperatura ambiente
- 250 gr azúcar blanco
- 5 huevos a temperatura ambiente
- 1/2 cdita extracto vainilla
- 300 gr harina de trigo
- 7 gr levadura química
- 1 pizca de sal
- 100 ml leche entera
- 200 ml nata líquida para postres
- 75 gr cacao puro (os recomiendo el de la marca Valor) + alguna cucharada para espolvorear en el molde
Elaboración:
Paso 1:
Empezaremos pre-calentando el horno a 170ºC, pues la receta es rápida y así va cogiendo temperatura. Además, también prepararemos el molde, engrasándolo con un poco de mantequilla o spray antiadherente y espolvoreando dentro un poco de cacao. Con golpecitos y movimientos iremos cubriendo todo el molde y este toque le dará brillo y un sabor extra a chocolate. Reservaremos.
Paso 2:
En un bol (si queremos hacerlo con varillas eléctricas) o en un robot de cocina pondremos la mantequilla junto al azúcar y batiremos a velocidad media durante unos 5 min o hasta ver que tengamos una especie de pasta homogénea. En este punto iremos añadiendo los huevos uno a uno, integrando el primero antes de seguir con el resto. Tras añadir el último huevo agregaremos el extracto de vainilla y batiremos un par de minutos más antes de apagar el robot o varillas.
Paso 3:
Ahora prepararemos 2 «masas» por separado: por un lado tamizaremos toda la harina junto a la levadura y la sal, lo cuál serán nuestros ingredientes secos. Por otro lado en una jarra o vaso alto mezclaremos la leche con la nata y agregaremos también el cacao. Mezclaremos bien hasta no ver grumos y que quede todo integrado y aquí tendremos nuestros ingredientes líquidos.
Paso 4:
Recuperaremos el bol inicial y encenderemos el robot a velocidad baja. Entonces iremos alternando la mezcla de ingredientes secos con la de líquidos: primero agregamos unas cucharadas de secos, integramos, luego uno poco de líquidos, integramos y seguimos así hasta acabar con las dos «masas» y terminando por la harina. Cuando terminemos la harina removeremos un par de minutos más y con la ayuda de una espátula o lengua repostera revisaremos que no queden restos de harina o ingredientes sin integrar. Si está todo homogéneo, lo podremos verter en el molde. Cuando lo hayamos rellenado lo moveremos un poquito para asentar toda la masa y nivelar la superficie, dando también unos golpecitos sobre la mesa. Taparemos el molde con papel de aluminio, para evitar que se nos queme la parte superior durante el horneado (porque es largo), y agujerearemos el centro para que el calor pueda circular y el bizcocho se cocine de forma uniforme. Cocinaremos el bundt unos 55 min, con calor por arriba y por abajo.
Paso 5:
Cuando queden unos 15 o 20 min de horneado, retiraremos el papel de aluminio para que se acabe de cocinar la parte superior y central del bizcocho. Antes de sacarlo del horno, lo pincharemos para comprobar que está bien cocinado. Pincharemos el centro y si sale limpio lo podremos retirar. Lo dejaremos sobre una rejilla unos 10 o 15 min y veremos como el bizcocho se va encogiendo, entonces le daremos la vuelta al molde sobre la misma rejilla y, si hemos engrasado bien las paredes, nos saldrá solo. Lo dejaremos sobre la rejilla hasta que enfríe por completo.
¡Listo! Ya podemos devorarlo. Os sorprenderá la esponjosidad que tiene y el sabor intenso a cacao es delicioso. Podríais hacerle alguna cobertura con ganache, chocolate derretido, caramelo,… incluso también podríais cortarlo por la mitad y rellenarlo de alguna mermelada o dulce, incluso de fruta. ¡Dale rienda suelta a tu creatividad!
Por cierto, podéis hacer esta receta sin problema con otro molde, pero en ese caso con unos 30 o 35 min de horneado tendréis suficiente. Los moldes de Bundt Cakes son más gruesos y los bizcochos necesitan más tiempo de cocción ☺️
Hola! te ha quedado espectacular! nos está dando ganas de hornear porque además queda precioso en ese molde que por cierto también tenemos jeje besis