Recetóóóón donde los haya. Es de las cosas más golosas que he comido y preparado recientemente, y eso que hace poco os he compartido una increíble receta de original cookies, un cremoso helado sabor cheesecake de limón o unos croissants de hojaldre casero con centro de chocolate.
Como podéis intuir por el título, Bueno Cookies, son unas galletas inspiradas en el famosísimo Kinder Bueno. Y no usaremos este tradicional barquillo, sino que recrearemos los sabores con los ingredientes que usaremos. Prepararemos un centro de crema de avellana y chocolate blanco, que refrigeraremos antes de introducirlo en la masa de galleta, para que durante el horneado se derrita y quede un interior deshecho y delicioso.
Para la masa de las galletas usaremos un mix de azúcar blando y moreno (o panela), que es un imprescindible para una buena receta de galletas. Y además añadiremos avellanas picadas y chips de chocolate blanco y negro, imitando las varias capas del barquillo de Kinder Bueno.
Antes de ir al detalle de la receta, quiero aprovechar para daros algunos tips imprescindibles para un resultado de 10:
- La mantequilla debe estar bien fría, para que nos queden como tropezones.
- Es una masa que hay que batir lo más mínimo posible y siempre a baja potencia. Os parecerá que os queda como a medio mezclar, pero así debe ser, no sufráis.
- Aunque cueste, porque vais a querer devorarlas, hay que refrigerarlas toda la noche. Así conseguiremos una cocción perfecta, que no se desparramen y que nos queden con una textura jugosa por dentro y crujiente por fuera.
- Cocinarlas el tiempo justo, entre 12 y 15 min. Aunque os parezca que están blanditas, no sufráis, es normal recién horneadas. Recordad que al sacarlas del horno no hay que tocarlas en unos 10 min, sino se romperán. Pasado este tiempo sí que será imprescindible pasarlas a una rejilla para que enfríen por completo y no se queden húmedas.
Espero que os animéis a probarlas, ya os avanzo que son muy adictivas, y que me contéis si os recuerdan realmente al Kinder Bueno. La verdad que en casa nos han encantado, sobretodo por el contraste de sabores y texturas. Espero vuestras opiniones y recetas por Instagram, no olvidéis mencionarme para no perderme nada 🙂
¡Ah! Si sois fans de las cookies, no os podéis perder la sección específica del blog, con recetas de galletas de todo tipo.
¡Os dejo ya con la receta!
Tiempo total: 30 min + refrigerado toda la noche
Raciones: 12 cookies
Dificultad: Baja
Ingredientes:
- 40 gr crema de avellanas + 40 gr chocolate blanco
- 190 gr mantequilla fría en cubos
- 135 gr azúcar blanco
- 135 gr panela
- 100 gr chips de chocolate blanco
- 100 gr chips de chocolate negro
- 40 gr avellanas troceadas
- 415 gr harina de trigo
- 1 y 1/2 cdita levadura
- 1 cdita sal
- 2 huevos
Elaboración:
Paso 1:
Empezaremos derritiendo el chocolate blanco y luego lo mezclaremos con la crema de avellanas. Cuando lo tengamos bien integrado, pondremos cucharaditas de la masa en una bandeja forrada, separadas un poco entre ellas, y lo llevaremos al congelador mientras seguimos con la receta. Aunque si podemos, mejor hacerlo unas horas antes.
Paso 2:
Pondremos los cubos de mantequilla en un bol grande y batiremos con unas varillas eléctricas unos segundos, lo justo para “romper” un poco los trozos. Luego añadiremos los azúcares y batiremos hasta que lo tengamos ligeramente combinado, pero repito, tendremos trozos irregulares y con una textura como arenosa.
Paso 3:
Añadiremos a la masa las chips de chocolate y las avellanas y mezclaremos unos segundos para integrar. Como os decía en la intro, lo importante es no sobrebatir la masa, siempre lo más mínimo y a baja velocidad.
Paso 4:
Mezclaremos la harina con la levadura y la sal y luego lo añadiremos a la mezcla. Batiremos lo justo para tener una textura arenosa, pero sin ligar del todo, quizás veremos hasta rastros de harina.
Paso 5:
Batiremos a parte los huevos y los agregaremos al bol. Mezclaremos lo justo hasta conseguir una masa uniforme, con la que poder formar bolas, de nuevo sin pasarnos.
Paso 6:
Pesaremos 100 gr de masa, bolearemos y presionaremos el centro, como haciendo una forma cóncava, como un cuenco. Recuperaremos las bolitas de avellana y chocolate que teníamos congeladas y pondremos una en el centro, en la forma cóncava creada, y la encerraremos con la propia masa, para que quede encerrada en el centro. Bolearemos de nuevo un poco y pondremos la bola (os aviso, son grandes!!) en un recipiente (tipo tupper). Repetiremos el proceso hasta acabar con toda la masa (tendremos aproximadamente 12 bolas). Taparemos el/los recipientes en los que hayamos puesto las bolas y refrigeraremos toda la noche.
Paso 7:
Al día siguiente, pre-calentaremos el horno a 185ºC, con una bandeja dentro. Luego colocaremos las bolas separadas unos 7 cm entre ellas y las hornearemos 12-15 min, hasta dorar.
Las dejaremos 10 min en la misma bandeja y luego las pasaremos a una rejilla para enfriar por completo. Conservadlas en un recipiente hermético.