Los bombones son un dulce perfecto para cualquier ocasión y, si son caseros, ¡mucho mejor! Siempre he temido bastante a hacerlos, sobretodo los rellenos, porque siempre he pensado que era la cosa más difícil del mundo. El chocolate es verdad que en algunos casos es muy versátil, pero en otros no es fácil tratar con él. Hace poco os traía unas fat-boms de chocolate y crema de cacahuete, que tienen un proceso muy similar. Si seguimos los pasos será muy fácil hacerlos y conseguiréis un postre delicioso en poco tiempo.
Soy aficionada al toffee, me encanta encontrarlo en dulces, caramelos, yogures,… así que me pareció un relleno genial para acompañarlo con el chocolate, porque además su textura cremosa combina perfectamente con el crujiente del chocolate endurecido. Pero podéis rellenarlos de otro chocolate, mermelada, caramelo,… ¡lo que más os guste! En esta receta os enseñaré a hacer el toffee, pero si no os gusta o preferís usar otro relleno, podéis saltaros ese paso.
Os recomiendo usar un chocolate de calidad, pues el resultado que se consigue es mucho mejor. Yo utilicé uno de cobertura, que aunque quizás no es el más adecuado, es muy buen chocolate para conseguir un resultado súper. Podéis utilizar mini capsulitas para bombones como estas o, si los queremos desmoldar, hacerlos en moldes de silicona o policarbonato.
Adoro los postres o detalles homemade y cómo sorprenden a cualquiera que se los ofrezcamos. ¡Conseguiréis que se queden con la boca abierta!
Tiempo total: 30 min (+ 60-80 min si queremos hacer el toffee casero)
Raciones: 15 bombones
Dificultad: Fácil
Ingredientes toffee:
- 200 ml nata para montar
- 175 gr azúcar blanco
Ingredientes bombones:
- 150 gr chocolate negro para fondant
Elaboración:
Paso 1:
Si queremos hacer el toffee casero, empezaremos con esta elaboración. Para ello pondremos todo el azúcar en un cazo a fuego medio y removeremos enérgicamente, sin dejar de remover. Poco a poco veremos como se va formando el caramelo. Parecerá que cuesta, pero veréis que primero se formará una especie de grumos y luego se convertirá en líquido y oscurecerá. En este punto, cuando lo tengamos líquido y en su punto, lo retiraremos momentáneamente del fuego. Calentaremos la nata al microondas sin que llegue a hervir, solo debe estar templada, y la verteremos sobre el caramelo. Removeremos muy bien mientras integramos toda la nata y lo volveremos a llevar al fuego para que se derrita en conjunto. Al principio puede que os cueste, porque tiende a solidificarse, pero veréis que poco a poco se irá derritiendo formando una especie de crema muy ligera. Pasados unos 5 min veremos que lo tenemos completamente líquido, en este punto lo retiraremos y lo verteremos en un cuenco o bol para que enfríe a temperatura ambiente. Veréis que a medida que enfríe endurecerá ligeramente, consiguiendo esa consistencia densa pero no dura y algo pegajosa típica del toffee. Os recomiendo prepararlo entre 1 y 2 horas antes de preparar los bombones, ya que debe estar frío antes de rellenarlos o se nos derretirán.
Paso 2:
Seguimos con los bombones. Para ello empezaremos derritiendo al baño maría o al microondas el chocolate. Si decidimos hacerlo al microondas os recomiendo hacerlo en tandas de 15 segundos, removiendo entre tanda y tanda, para evitar que se nos queme el chocolate. Una vez tengamos el chocolate fundido y a la consistencia deseada, rellenaremos las cavidades del molde que hayamos escogido o de las capsulitas para bombones. Lo rellenaremos hasta arriba, como podéis ver en la foto. Golpeamos ligeramente el molde sobre la encimera para que el chocolate se asiente bien y lo dejaremos reposar alrededor de un minuto.
Paso 3:
Pasado el minuto, volcaremos del molde sobre una rejilla con una bandeja o plato debajo que recoja el chocolate sobrante, de manera que en el molde solo nos quede el chocolate en la base y las paredes. Lo dejaremos así unos 15 min, para conseguir que el chocolate se asiente y se seque un poco y los podamos rellenar.
Paso 4:
Cuando ya haya endurecido un poco el chocolate, será el momento de rellenarlos. Como os decía antes tenéis varias opciones y podéis hacerlo con aquello que más os guste, pero siempre utilizad un relleno que esté frío, de lo contrario, se os fundirá la capa de chocolate inicial.
Si hemos hecho el toffee, una vez fío lo pondremos en una manga pastelera o una bolsa de congelación, y lo verteremos dentro de cada bombón. El relleno no debe llegar hasta arriba ya que hay que acabar de cubrirlo de chocolate, pero sí debemos llegar bastante al borde. De todas formas, aquí también podéis inventar como más os guste, si deseáis una capa de chocolate más gorda en la base, entonces simplemente deberéis rellenar un poco menos el bombón. Después cubriremos con chocolate hasta la superficie del molde o cápsula y, con la ayuda de una espátula, alisaremos toda la superficie para que nos quede la base de los bombones bien recta.
Paso 5:
Dejaremos los bombones a temperatura ambiente o en la nevera para que terminen de enfriar y endurecer. Cuando estemos seguros de que están bien duros, los desmoldaremos con cuidado. Si hemos decidido ponerlo en capsulitas, no hará falta desmoldarlo y los podemos presentar así directamente.
Son unos mini dulces muy cuquis y que se os derretirán en la boca. El contraste del amargor del chocolate negro con el dulzor del toffee es increíble. ¡A disfrutar!