A veces, un detalle puede llegar a ser el mejor de los regalos. Si quieres recordarle a tu pareja, familia o amigos cuánto los quieres, ¿qué mejor que hacerlo con algo que ha elaborado uno mismo? Esta sencilla y rápida receta tiene ese toque especial que estás buscando, ¡incluso si lo único que buscas es un delicioso snack!
Tiempo total: 45 min
Raciones: 16 «brochetas»
Dificultad: Baja
Ingredientes:
- 1 lámina de masa brisa para postres
- Mermelada al gusto
- Nutella o chocolate para postres
- 1 huevo
- Moldes en forma de corazón
- Palitos tipo brocheta o tipo helado
Elaboración:
Paso 1:
Empezaremos extendiendo la masa brisa sobre la superficie de trabajo y la estiraremos con un rodillo para evitar que nos quede una masa demasiado gruesa y así también conseguir el máximo de corazones posible.
Paso 2:
A continuación, cortaremos la masa con un molde en forma de corazón, intentando que te salgan números pares para que no se quede ningún corazón sin su cobertura. No escojáis un molde demasiado pequeño, porque no os cabrá mucho relleno y no solo os será muy difícil de cerrar, si no que se os saldrá durante el horneado y os quedarán huecos por dentro. Cuando hayamos recortado toda la masa, podemos volver a juntar las sobras y volver a estirarla para cortar nuevos corazones, pero si lo hacéis, os recomiendo que la amaséis un poco, la llevéis a la nevera para que repose unos 15-20 min y después la estiréis. Ya que si no, lo que pasará es que cuando recortéis la forma se os encogerá.
Paso 3:
Separaremos los corazones y los iremos colocando en una bandeja de horno forrada con papel vegetal y con algo de separación entre ellos. Para aprovechar el espacio los podéis colocar en direcciones opuestas. Colocaremos solo la mitad de los corazones, las otras mitades serán las coberturas. Si no os cabe todo en una bandeja, podéis repartirlo en dos. Después colocaremos palitos de chupa-chups o de madera en el centro de cada base, sin que quede muy arriba, pero que nos pueda sujetar la «piruleta». Este punto es opcional, pues podéis simplemente cerrarlos y que queden como unos bombones o caramelos. Si optamos por la opción de palos de madera, antes deberemos mojarlos en agua para evitar que se quemen en el horno.
Paso 4:
Con la ayuda de una cucharita, colocaremos el relleno en el centro de cada base de corazón, dejando espacio libre alrededor para evitar que cuando lo tapemos se escape el relleno por los laterales. Lo divertido es que tengan varios sabores y que sea una sorpresa al comerlos: en esta ocasión los rellenaremos de mermelada de fresa y chocolate, ¡pero la imaginación no tiene límites!
Paso 5:
Antes de taparlos, barnizaremos ligeramente con agua y un pincel para postres, los bordes de los corazones, de esta manera cuando juntemos las dos mitades consigamos que se peguen bien. Después cubriremos los corazones con las mitades de corazones vacías que habíamos reservado y los sellaremos por alrededor con un tenedor, como si hiciéramos empanadillas.
Paso 6:
Batiremos un huevo y barniza todos los corazones para que al hornearlos salgan bien doraditos y crujientes. Si lo deseamos podemos espolvorear azúcar normal o glas para endulzarlos. Después, con el horno pre-calentado a 180ºC, los cocinaremos durante 20-30 minutos. Dependiendo del horno, podrá tardar más o menos en cocinarse, por lo que os recomiendo que a partir de los 15 min vayamos controlando. Cuando veamos que están bien dorados ¡ya los podemos sacar! Los dejaremos enfriar ¡y sólo quedará probarlos!
Si has pensado regalárselos a alguien especial, ¿por qué no los pones en una cajita o bolsita decorativas y lo dejas con la boca abierta?
❤
Estoy muy satisfecho de encontrar esta web. Quería daros las gracias por escribir esta obra maestra. Sin duda he disfrutando cada pedacito de ella. Os te tengo en la lista para ver más cosas nuevas de este blog .